Los romanos llegan a la península en 218 a.C durante la segunda guerra púnica. Aquí comenzará el proceso de romanización y conquistas. Los romanos dividieron la península en Ulterior y Citerior. Estuvieron aquí hasta el siglo V d.C cuando llegaron los Bárbaros.
El subsuelo de Granada ofrece sorpresas en cuanto alguien se aventura a excavar. En los últimos años el pasado romano de Granada ha aflorado de forma continua, tanto en la capital como en la provincia, con descubrimientos como las termas y el mosaico en Los Mondragones, el sarcófago de la plaza Villamena, el dominus de Salar, unas termas en el Albaicín, el mosaico en la plaza Rafael Guillén los restos cerámicos, tumbas tardoromanas y murales encontrados durante la construcción del Metro en el cruce del Camino de Ronda con la calle Recogidas, junto a la gasolinera.
Iliberis
Esta ciudad se encontraba en en Albayzín. Resulta evidente que Granada es más mora que romana. Al menos así lo atestiguan los restos edilicios que han logrado sobrevivir a quinientos años de piqueta. No obstante, la etapa romana granadina fue de gran importancia para esta tierra. Muchos de los monumentos musulmanes están levantados sobre cimientos del imperio romano, reutilizaron sus piedras. La ciudad romana de Florentia Iliberritana o Iliberri perduró durante casi tanto tiempo como la etapa islámica. Sus restos están bajo nuestros pies, derruidos en su mayor parte. En el último medio siglo, las apariciones de restos romanos confirman la gran importancia que tuvo la Granada romana. Iliberri fue importante para Roma, hasta el punto que varios granadinos llegaron a ocupar altos cargos en el imperio.
Togado de Periate. Esta es la escultura romana más importante de Granada. Apareció en 1982 en el Cortijo de Periate, entre Píñar e Iznalloz. Representa a un alto personaje del siglo III (quizás a los emperadores Decio, 249-51, o Clodio el Gótico, 268-70). La escultura estaba descontextualizada. Este tipo de retratos eran colocados en los foros de ciudades importante sobre pedestales. También en villaes campestres. El foro de Iliberri debió contar con varias similares en mármol o bronce. Fuente: Vídeo de Felipe Pedregosa y Museo Arqueológico de Granada.
El iliberritano más importante, del orden senatorial, en el Alto Imperio fue Publio Cornelio Anulino, de la tribu Cornelia. Se trató de un joven granadino que, a los 12 años, fue enviado a Roma a iniciar su cursus honorum. Nació hacia el año 138-40. Pasó por todos los estadios de formación y cargos civiles, antes de enfilar su carrera militar como mano derecha del emperador Septimio Severo. Fue cuestor (gobernador) de la provincia Bética; Gana la batalla de Isos y reprime a los partos (sirios); en 197 es general en la batalla de Lyón. En 199 vuelve a ser cónsul de la ciudad de Roma y emperador sustituto por ausencia de Septimio Severo. En 202-3 está de prefecto de la Roma y encargado de construir el arco de Septimio Severo (Una de las dos estatuas ecuestres originales estaba dedicada a él mismo, al lado derecho del emperador).